Julia Ballve
"Julia Ballvé"
Acrílico sobre lienzo
146 x 97 cm
2012

Julia Ballvé Eguren (Bilbao, 1925)

Pasa su infancia en Bilbao. En julio de 1936 la familia se encuentra en Madrid pasando el verano cuando se produce el levantamiento fascista. Julia marcha con su padre al Ministerio de la Guerra y al regresar a casa el tranvía en que viajan es ametrallado desde una iglesia.

Marchan en barco desde Alicante hacia Bilbao. Allí el padre de Julia, José Ballvé, es nombrado director de transporte del gobierno vasco. Al caer Bilbao en manos de los fascistas, la familia se traslada a Santander donde Julia vive con sus padres y su tía en una habitación de un piso incautado, durmiendo todos en el suelo. De Santander Julia marcha con su madre, Julia Eguren, y su tía Mercedes hacia Francia en las bodegas de un barco que transporta trigo. Al llegar a Burdeos son trasladados en tren a Nogen Sur Seine, un pueblo a unos 100 km de París donde son metidos todos en una cárcel vacía en la que pasan la primera noche. Al día siguiente consiguen que les dejen salir y todos los refugiados son trasladados a una escuela donde duermen en un bodegón gigante. Tres meses después reciben noticias del padre de Julia que se encuentra en Barcelona, así marchan las tres de vuelta a España. Allí una noche les cae una bomba que aunque no llega a explotar, queda incrustada en una viga encima de ellos.

A principios de 1939 salen de Barcelona rumbo a Francia en el coche de un chófer que había tenido el padre de Julia en Bilbao. Su tía Mercedes, enferma e imposibilitada para caminar, se queda en Barcelona donde fallece posteriormente. El coche donde viajan se estropea en el camino y tienen que hacer noche en una masía alquilando una habitación. Continúan el camino a pie, durmiendo en la carretera o en el baño de una casa abandonada, hasta que consiguen llegar a La Junquera. Allí consiguen meterse en un camión que les lleva hasta la frontera. Al cruzar la frontera son introducidos en un tren que les lleva hasta Morez du Jura, junto a la frontera suiza. Primero duermen en un barracón y luego el notario del pueblo les aloja en su casa donde permanecen varios meses. La madre consigue trabajo en un hotel y la familia se traslada a vivir allí. En el verano de 1939 el padre consigue trabajo en una fábrica de acero en Champagnole y se trasladan allí, donde Julia comienza a asistir al colegio.

Desde su llegada a Francia el padre de Julia intenta sacar a la familia de Europa. El 19 de junio de 1940 consiguen embarcar en el barco “Cuba” que sale de Burdeos rumbo a Santo Domingo, donde al llegar, tras 42 días de travesía haciendo escala en Casablanca, les dicen que si no pagan 10 dólares por cabeza, no pueden desembarcar. Tienen que viajar de isla en isla durante varios días hasta que consiguen desembarcar en Martinica. Desde allí consiguen llegar a México en el barco “Saint Domingue” que llega al puerto de Coatzacoalcos en Veracruz el 26 de julio de 1940. En Veracruz primero son instalados todos en un gran bodegón y posteriormente acogidos en casas particulares. De allí marchan a México DF donde Julia entra a estudiar en la Academia Hispano Mexicana y sus padres se ponen a trabajar. El padre encuentra trabajo en una fábrica. La madre de Julia trabaja primero vendiendo vestidos de puerta en puerta y luego monta una tienda de telas.

En 1946 Julia consigue la nacionalidad mexicana. Comienza a estudiar Comercio pero deja los estudios para ponerse a trabajar. Encuentra trabajo primero vendiendo vestidos en el Palacio de Hierro. En mayo de 1948 se casa con Eugenio Sisto, otro refugiado con quien llega a tener tres hijos. En 1967 Julia regresa a España por primera vez.

En 2012 sigue viviendo en México DF. Siente tristeza al ver la facilidad con la que los pueblos olvidan su pasado y vuelven a cometer los mismos errores.

Fuentes:

  • Entrevista a Julia Ballvé, 5 de marzo 2012. México DF.
  • Autobiografía de Julia Ballvé.